Castagnino+macro




Maccari, José Luis

Buenos Aires, 1928
Vive y trabaja en Buenos Aires

Pintor de amplia trayectoria vinculado al grupo de artistas del barrio porteño de La Boca. De pequeño concurrió al taller del pintor y grabador José Arcidiácono. Realizó sus estudios de nivel secundario en el Colegio Santa Catalina, en aquel momento, dirigido por el sacerdote salesiano Salvador Galant que en sus clases enseñaba dibujo. También tuvo como docente al artista Eduardo Jonquieres, con quien compartió charlas acerca de arte, museos y experiencia artística. Más tarde realizó el profesorado en Letras en la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas N°2 Mariano Acosta de Buenos Aires. Título que le permitió, años posteriores, ejercer la docencia en diversas escuelas de la ciudad. A los 20 años concurrió a un taller de dibujo con modelo vivo dirigido por Demetrio Urruchúa. También formó parte del grupo de estudios de Ideal Sánchez, quien llevó adelante una importante actividad docente. Allí, adquirió conocimientos sobre la química de los pigmentos utilizados en las pinturas y los sistemas cromáticos elaborados por Milhelm Oswald y Albert Munsell que aplicaría en su producción pictórica. Además entabló amistad con el pintor José Beloso.

En 1952 formó parte de la Agrupación Gente de Artes y Letras Impulso presidida inicialmente por Fortunato Lacámara, tras su creación en 1940. Entonces expuso en reiteradas ocasiones acompañado de artistas de diversas generaciones reunidos en torno a una vivencia común: el barrio La Boca. Entre ellos: Miguel Diomede, Marcos Triglio y Miguel Carlos Victorica.

La experiencia personal en el barrio, sus tradiciones, los paisajes y las costumbres de aquella época fueron los primeros acontecimientos plasmados en sus pinturas. De ese año es la obra Rincón bernalense que ingresó a la colección del Museo Castagnino por donación de Constancio Fiorito, en 1954. Una obra figurativa en la que representa un paisaje rural de Bernal. Localidad que, el artista, en aquella época, visitaba los fines de semana junto a otros jóvenes.

Al mismo tiempo que continuó con estas indagaciones de las formas a partir de una escena existente Maccari desarrolló, desde la década del 60, otras líneas de trabajo que surgieron de la manipulación de materiales como el cartón y la madera. Comenzó realizando relieves que presentaban una superposición de planos y formas geométricas monocromáticas. También indagó en la adecuación de herramientas de corte para obtener formas precisas con esos materiales. Más adelante, aparecieron otras obras en las que la materia, el color y el gesto prevalecen al reconocimiento de las formas, que denominó constructivismo disruptivo. En ellas empleó madera y materiales que otorgaban cierta consistencia a los pigmentos.

En 1961 participó en la exposición “Arte No Figurativo de la Agrupación Arte No-Figurativo de Buenos Aires”, realizada en el Museo Castagnino. Además ha formado parte de otras instancias expositivas en Argentina, Venezuela e Inglaterra.

Su obra se encuentra representada en importantes colecciones públicas y privadas del país y el extranjero.

Ha sido reconocido con el J. H. Loudon Shell International Price.

Noviembre 2020