Estol, Leopoldo
Buenos Aires, 1981
Vive y trabaja en Buenos Aires
Artista, docente, curador y escritor de arte. Apareció en la escena artística argentina a partir del año 2000 con producciones que giraban en torno a la precariedad y estaban compuestas por una superabundancia de elementos como si se tratase de exhaustivos inventarios que seguían el orden lógico de algún acontecimiento desprevenido: elementos de uso cotidiano, materiales diversos, desechos, etc. A pesar de sus características formales, estas instalaciones, no eran completamente antojadizas. Con ellas proponía nuevos sistemas, nuevas redes de relación y correspondencia entre los componentes, y el espacio a ocupar. Algunas de estas propuestas, de su etapa inicial, fueron realizadas junto a Diego Bianchi — con quién compartió taller en el Programa de Talleres para las Artes Visuales coordinado por Guillermo Kuitca, Centro Cultural Rojas-UBA —, e integraron los movimientos contraculturales promovidos por la galería Belleza y Felicidad, entre otros espacios de arte. Su formación estuvo también vinculada al cursado de la carrera de Historia del Arte en la Universidad de Buenos Aires y a su paso por los talleres de Martín Kovensky, Pablo Siquier, Ernesto Ballesteros y Jorge Macchi.
A continuación, exploró otras manifestaciones del arte contemporáneo que lo condujeron al desarrollo de prácticas artísticas que implicaban la colaboración y la participación de diferentes comunidades y territorialidades. Entre ellas, la realización de un taller de arte junto a un grupo de niños en un barrio humilde de la ciudad de Tucumán, por invitación de Carola Beltrame en 2009. Las acciones desplegadas en este territorio articularon la actividad artística, los habitantes del lugar y el espacio público. Ese mismo año cursó un taller de formación en el Centro de Investigaciones Artísticas donde un urbanista, al analizar el circuito de las galerías de arte, advirtió los terrenos de Retiro donde se encuentra la Villa 31. Espacio hasta entonces inexplorado por el artista al que concurrió — junto a sus compañeros: Laura Códega, Renata Lozupone, Paula Massarutti y Dudu Quintanilha — para llevar adelante acciones estéticas en conjunto como la realización de una escultura móvil y un taller de arte para niños. En 2014 realizó un mural en el barrio Toba de la zona oeste de la ciudad de Rosario, coordinado por el Centro Cultural El Obrador, en el marco de la 10° Semana del Arte en Rosario. Estas experiencias de carácter procesual, colaborativa y comunitaria debaten las jerarquías culturales, el concepto unitario de autoría, y procuran potenciar las capacidades perceptivas y creativas de los participantes.
Entre otras actividades ha participado en proyectos de investigación, ha sido docente en Universidades y, desde octubre de 2013, dirige la publicación independiente sobre pensamiento y arte contemporáneo El Flasherito junto con Andrés Aisicovich (Buenos Aires, 1985) y Liv Schulman (París, 1985).
Su obra ha sido exhibida en Buenos Aires, Rosario, Tucumán, Porto Alegre, Río de Janeiro, Madrid y Basilea.
Junio 2020