En sin título, el dibujo que nos ocupa realizado a la carbonilla, es posible advertir que las características del lenguaje de las pinturas han sido transpuestas a la obra gráfica sin alterar el tono de su estética. Presas representa una figura de mujer -uno de sus temas preferidos- en el que desarrolla su concepto de belleza femenina en clave de ondulaciones y curvas que alteran el cuerpo, especialmente el cuello, los brazos y el torso, generando una imagen sensual y poética, ajena a la realidad. También aparecen otras imágenes que parecen levitar sobre nuestra retratada, un rostro masculino y una figura femenina que ganan corporeidad entre los trazos con los que el artista compone el fondo de la composición.
La obra fue parte del conjunto -formado también por el óleo sin título (1984) y grabados-, adquirido por la Fundación Castagnino para el Museo Municipal de Bellas Artes luego que la Academia Nacional de Bellas Artes le otorgara a Leopoldo Presas el Premio Rosario en 1999.
Matía de la Paz López Carvajal
Bibliografía
GENÉ, ENRIQUE, Pequeña antología, Buenos Aires: Galería Van Eyck, 1989.
GUTIERREZ ZALDÍVAR, IGNACIO, Leopoldo Presas, Buenos Aires: Salas Nacionales de Exposición, 1994.
GENÉ, ENRIQUE, Leopoldo Presas: El amor en todas sus formas, Buenos Aires: Editorial Club de Estudio, 1993
LÓPEZ, ANAYA, JORGE, Historia del arte argentino, Buenos Aires: Emecé, 1997,p. 196.
PELLEGRINI, ALDO, Panorama de la Pintura Argentina contemporánea, Buenos Aires: Editorial Paidos, 1967, p.121.
Colección Histórica del Museo Castagnino, Rosario: Ediciones Castagnino/ macro, 2007, p.101.
Presas, Leopoldo
Buenos Aires, 1915
Buenos Aires, 12 de junio del 2009
Presas inició sus estudios en la Academia Nacional de Bellas Artes y en el Instituto Argentino de Artes Gráficas, donde fue alumno de Lino Eneas Spilimbergo. Expuso por primera vez en 1939 junto al Grupo Orión, del que fue miembro fundador junto a Barragán, Sanchez, Forte y Venier, entre otros. Entre 1950 y 1951 viajó a Europa, visitó Francia, España, Bélgica e Inglaterra. En 1956 fue invitado a exponer en la Bienal de Venecia y en 1959 volvió a exponer en esta bienal y en la de San Pablo. En 1959 obtuvo el Gran Premio de Honor del Salón Nacional y en 1963 el Premio Palanza otorgado por la Academia Nacional de Bellas Artes. En 1976 fue nombrado académico de número en la Academia Nacional de Bellas Artes. En 1979 volvió a Europa y se radicó en Paris hasta 1987. Desde 1946 ha realizado treinta y cinco exposiciones individuales entre las que se destacan la retrospectiva organizada por Rafael Squirru en la Huntington Hartford Collection de New York en 1967 y la de 1994 en el Palais de Glace de la ciudad de Buenos Aires.
Luego de sus ensayos surrealistas junto a los integrantes del Grupo Orion, Presas realizó hacia los años 60 las series de pinturas Los cerdos, Los Personajes y Los Reyes de la Podredumbre, influido por las estéticas del Informalismo y la Nueva Figuración. Luego compuso un lenguaje individual caracterizado por el despliegue del gesto y del color, en el que las alusiones a lo onírico de sus comienzos no desaparecen por completo. Con un trazo rápido del pincel esboza las figuras y se aleja de una definición convencional de los volúmenes en beneficio de estilizaciones y deformaciones que afianza con una paleta vibrante de color, logrando una intensa fuerza expresiva.
Si bien la práctica pictórica de Presas descubre la importancia que la línea tiene en su lenguaje, el dibujo como técnica independiente ha sido para el artista un hábito en el que ha experimentado con diversos medios.