Imagen no disponible.
En el paisaje Boulogne-sur-mer la luz es protagonista, aunque mantiene una paleta de grises azulados y tierras. La atmósfera ha sido resuelta con pinceladas cortas y planas, manchas que recuerdan la técnica de los macchiaioli italianos. La ciudad francesa fue su destino en 1913, donde visitó a la nieta del Gral. José de San Martín y se documentó sobre la estancia del prócer argentino en esa ciudad francesa para realizar la obra San Martín en Boulogne-sur-mer.
El asunto elegido de Boulogne-sur-mer es el puerto de la ciudad. Fechado en 1914, el óleo representa uno de los lugares por donde -según la versión del propio Alice- San Martín paseaba diariamente, conversaba con los pescadores y observaba la llegada y salida de barcos hacia América.1
La obra presenta una dedicatoria al médico Rubén Vila Ortiz, fundador y presidente de la Asociación El Círculo. Vila Ortiz fue miembro fundador e integrante de la Comisión Municipal de Bellas Artes en 1917, que pronto fue sustituido por Magín Anglada, aunque su trato con los miembros fue permanente. Recién en 1927 volvió a integrar la Comisión Municipal de Bellas Artes. Él mismo donó el óleo de Alice en 1940.
Alice había mantenido una fluida relación con los miembros de la Comisión Municipal de Bellas Artes y fue considerado un artista afín a los ideales de sus integrantes. Fue invitado a participar en el I Salón de Otoño y al año siguiente convocado como jurado del II Salón de Otoño, pero se excusó y participó de la muestra sin concurrir a premio. En 1919 expuso en la sede rosarina de Witcomb la muestra De la Argentina al Brasil. Una nota en la revista El Círculo de ese año se refiere al artista como “este simpático artista argentino, sobradamente conocido de nuestros lectores, dejó cimentada entre nosotros la justa fama y nombradía que con su incesante labor se ha sabido conquistar.”2
María de la Paz López Carvajal
1 En Alice, Antonio, “El argumento en el arte pictórico”, conferencia dictada en el salón de actos de La Prensa, Buenos Aires, 1938.
2 “Exposiciones de arte”, Revista El Círculo, Rosario, 1919-1920.
Alice, Antonio
Buenos Aires, 1886
Buenos Aires, 1943
Inició su educación artística junto a Decoroso Bonifanti (1860 -1941). En 1903 asistió a la Sociedad Estímulo de Bellas Artes y al año siguiente ganó el premio Roma, que le permitió viajar a Italia con una pensión para completar su formación. En Turín cursó estudios en la Real Academia Albertina junto a los maestros Francisco Gilardi, Giacomo Grosso y Andrea Tavernier. Activo participante de salones nacionales y extranjeros, recibió en el de París de 1904 una medalla de plata por su obra Confesión; en el del Centenario en 1910, una medalla de oro por la tela La muerte de Güemes (inaugurando así su producción de grandes composiciones históricas, que surgió de la inquietud de participar del concurso de cuadros históricos de temas nacionales organizados para la celebración del Centenario); en el primer Salón Nacional le fue otorgado el Premio Adquisición por su obra Retrato de señora y en 1915 fue galardonado con la Gran Medalla de Honor en la Exposición de San Francisco de California. En conjunto, la obra de Alice revela inclinación a los valores académicos y tradicionales. Su concepción del arte lo llevó a los temas históricos, en los que encauza su intención pedagógica.
Retrato de Nicolás Amuchástegui, 1916